Vistas a la página totales

domingo, marzo 14, 2010

Lija al agua

Pasa rauda y se le caen las cajas que sirven de armario, en segundos hay de todo desparramado en el suelo. Grita y se descompone.
-No pienso recoger nada.
- Debes hacerlo lo botaste tu y cada uno se hace cargo de su enredo. Le digo a mi hija.
Con un aburrimiento feroz se dispone a recoger lo regado en el piso. Y aparece en la cocina diciendo :
- esto lo voy a botar…..
- que es?, pregunto.
Y me muestra un pedacito cuadrado de papel negro, que le cabía en la mano.
- No. No puedes botarla, es mi lija al agua y es muy cara.
- Hace cuanto la tienes guardada?
- No sé, unos cuatro años o más, viajo conmigo desde Concepción.
Yo no sé que fue tan gracioso, pero su risa me contagió.
- La usas?
- No, pero puedo necesitarla.
Risas otra vez.
La situación era ridícula en verdad y termina diciéndome:
-Cuando la ocupes me llamas para verte. No puedo creer que esto ande contigo. Me podrías dar tres funciones para esto? Lija al agua!!!
- Yo sabré.

Total, saco como conclusión que mi hija no me entiende.

No hay comentarios.: