CONVULSIÓN 

En días normales para el hemisferio sur, bien dicho América del Sur, no hay mucho que hilar, son tiempos relativamente tranquilos a nivel macro. Cada ciudadano anestesiado con su vida diaria de sostén, televisión guiada y ocio mal entendido, transformandose en enfermos, lentamente de los males del sedentarismo. Mayormente embobados, por la última telenovela, el día del niño, el día del padre, de la madre, del abuelo, del enfermo de algo y suma y sigue. Los quehaceres sólo se limitan a lo indicado en la televisión y revistas. La anestesia del consumismo es el afán último de hoy. 

En el otro lado del mundo, convulsión, desastre, muertes. Tenemos apenas la percepción clara de lo que pasa, sesgado por algunos grupos que intentan comunicar de alguna forma, para tomar parte de una u otra facción.  Si bien se ha rechazado veladamente por algunas naciones el actuar de Israel, no bien informados he leído atrocidades en contra del pueblo judío. Lamentablemente no estamos en sus pantalones, lamentablemente no estamos de otro lado.

Tan fácil criticar sin tener todos los antecedentes a la luz.  Israel creció dadas las condiciones absolutamente porfiadas de recuperar su territorio ancestral. Basta un poco de historia. Así el territorio árabe, Palestina fue perdiendo tierra a punta de guerras. La peor de las separaciones: religiosa.

Al recorrer la historia de ambos países, se viste de sangre en la línea del tiempo.

No defiendo posiciones, pero es justo aceptar que desde los 80s sistemáticamente facciones extremistas árabes se vistan de explosivos y corran libremente a algún restaurant en donde familias almuerzan a mediodía ?. Para Israel es una guerra contra el terrorismo fanático. Se debe recordar que el terrorismo es comandado por líderes negativos repletos de odio, que no dan la cara y que ejercen el liderazgo sobre ignorantes que obedecen ciegamente a tales personajes creyendo a pie juntilla que el sacrificio, martirio llamado por ellos, los llevara a la gloria en la muerte. Resumen un pueblo que viene sumando bajas civiles desde hace varias décadas a vista y paciencia del mundo. Punto para Israel, quien me parece tiene derecho a tener el sistema interno que se les antoje si abogamos por la libertad.

Si bien. Palestina ha sido un pueblo sufrido, no se puede perder de vista que dentro de los propios árabes tenemos diferentes corrientes de pensamiento, entre ellos también luchas por ganar el poder, los unos sobre los otros, a punta de guerras internas el pueblo ha sufrido lo indecible para sobrevivir, todo para ellos es amenaza y es común ver fotografías de niños armados, utilizados como señuelos y adoctrinados para la guerra. Es lamentable pensar que los dineros acumulados por el oro negro tampoco ha sido repartido de forma equilibrada en la población. No dista de lo que se ve en todos los pueblos del mundo hoy por hoy, el poder del dinero y el aumento de la pobreza. Dadas estas condiciones es un pueblo que vive a la defensiva, ya que no saben de donde vendrá la bala.

Estando así caldeados los ánimos, explota el conflicto que estaba disimulado nada más. El pueblo en Gaza, sufre hoy un aniquilamiento sistemático por tener entre su población a personajes con rasgos esquizoides de odio profundo a los israelíes, un grupo apodado Hamas, gente belicosa y soberbia, apoderándose de las armas e incitadores de odio. Y es justamente donde se entiende la frase: pagan justos por pecadores. Israel en su afán de defensa busca como objetivos los túneles cavados laboriosamente que recorren el territorio y que la facción terrorista utiliza como fuertes, dejando en la superficie a los ciudadanos comunes y corrientes, quienes son asesinados por las bombas. 

Hoy, se ha dado un espacio de paz por dos días. Pero esto es para largo.

El grano de arena hoy, es sólo enviar vibraciones positivas y atesorar La Paz en nuestros corazones, para ver si un pedacito de ese pensamiento-sentimiento, llegue a las almas de ambas naciones.